La League of Legends Pro League (LPL) siempre ha sido una liga especial. Un espacio donde la locura siempre ha estado a la orden del día por el ritmo que comporta la competición dentro de la Grieta del Invocador. Que Invictus Gaming consiguiera la Copa del Invocador en 2018 hizo que el interés por la LPL creciera radicalmente. Según los datos de Esports Charts, pasó de tener picos de 100.000 espectadores como hecho puntual a superarlos como ‘norma’ tras ese año. Si Corea del Sur no ha mantenido una época de dominación aún más larga es principalmente por causa del campeonato chino. Por ello, no contar con una emisión oficial a cambio de un co-streaming muestra por qué esta herramienta era un Caballo de Troya desde un principio.

El co-streaming, como herramienta, siempre ha sido una buena noticia para los deportes electrónicos. Independientemente si está destinado para la LPL, la League of Legends EMEA Championship (LEC) o un Mundial. Un gran método para acercar a grandes creadores de contenido para acercar a los espectadores a una competición que, de otra forma, probablemente no habrían seguido. Sin embargo, si es un Caballo de Troya no es tanto por lo que puede aportar, sino por todo lo que oculta. Porque detrás de esta posibilidad se almacenan todas las malas gestiones para no monetizar el público, la incapacidad para generar interés sobre un producto y la dependencia en ciertos equipos. Sólo hace falta revisar las audiencias de la LEC en 2023 para ver cómo Ibai Llanos y KOI han sido quienes han cargado más peso.

No obstante, de cara a 2024 la emisión oficial de la LPL, la que ha trabajado tantos años por la emisión y difusión de la competición, podría desaparecer. Por lo menos, según la información que ha desvelado el creador de contenido Christopher Mykles “Montecristoen Twitter. “Actualmente no hay planes para continuar la transmisión oficial de la LPL en inglés el próximo año. La producción existente ha sido cancelada y Riot aún tiene que intervenir para proporcionar otra solución”, ha declarado. Por ello, el streamer y exjugador profesional Christian Rivera “IWDominate” se ha propuesto hacerse cargo de un co-streaming de la liga. Todo para evitar que el campeonato no tenga una emisión para el público anglosajón. De los pocos ‘mis huevos’ que realmente da gusto escuchar.

De todas maneras, existe un problema en la buena fe de IWDominate. Lo explica el creador de contenido y exentrenador Michael Archer “Veteranen Twitter: “No digo que no debería hacerlo, si salva a la mayor cantidad posible del personal actual de la LPL es algo bueno. Pero Riot tomará esto como una justificación para su decisión. Si creen que los co-streamers pueden reemplazar la retransmisión, el movimiento de ‘Dom’ lo confirma”. Si Riot Games habilita el co-streaming es en parte porque puede usarse como una herramienta para ahorrar gastos y seguir sacando rédito de su producto. La externalización de los servicios y las emisiones nunca supone ningún problema. Pero recompensar producciones ‘baratas’ -no por IWD- sí puede serlo. Así no se recompensa el trabajo, simplemente la popularidad. Aunque los números están a la orden del día, la calidad marca la diferencia entre comer a corto, medio o largo plazo.

El caso de la LPL y el co-streaming muestra que la herramienta es un Caballo de Troya desde un primer momento. Que enfoca la Guerra de Troya desde una perspectiva errónea. Porque los ataques pueden cruzarse entre los aficionados contra los co-streamers, cuando ninguna de ambas partes es la principal responsable de la situación. Los cuchillos pueden volar hacia los comentaristas de la emisión en forma de ‘reproches’ cuando este tipo de decisiones se escapa completamente de sus manos. En el caso de confirmarse la ausencia de una retransmisión oficial, supondría otra situación en la que se muestra la gran diferencia de realidades entre los trabajadores y las figuras en posiciones de poder. Porque la pregunta de ‘¿qué han hecho la LPL y League of Legends Championship Korea (LCK) para monetizar su audiencia anglosajona?’ se debe dirigir hacia la punta de la pirámide, no a la base.

Entre la LPL y la LCK no hay respuestas claras

Por muy rivales que sean, la LPL y la LCK comparten características que las unen. No sólo por ser las dos mejores ligas del mundo y por no monetizar excesivamente bien su audiencia anglosajona, también por el actual estado del League of Legends internacional. Los debates sobre cuál es la mejor competición del mundo en la actualidad son necesarios, aunque personalmente a veces me llegan a cansar. Sin embargo, después de todo lo sucedido desde 2021, a mi parecer ocurre un hecho fantástico: no hay respuesta clara en relación al último tópico.

No nos viene mal no tener una respuesta clara a la pregunta de ‘cuál es la mejor competición del mundo’ después de tantos años de dominación surcoreana. Los dos últimos Mundiales se han ido a Corea del Sur, mientras que los dos últimos Mid-Season Invitationalsi a China. Por lo tanto, para resolver esa pregunta a favor de la LPL o la LCK, quizás es necesario un poco más de tiempo. Y no está mal para, cada vez que llegue un torneo internacional, intentar centrar el debate en los equipos como tal en lugar de dar por hecho que ganarán ciertas organizaciones por su nacionalidad. Parafraseando a Lee Sang-hyeok “Faker”: que yo sepa, esas competiciones van por clubes, no regiones.