El equipo surcoreano de DWG KIA se hizo con el campeonato de la LCK hace tan solo unos días. Siguiendo la estela de victorias que encadena desde verano del año pasado, el club se ha vuelto un imprescindible en las quinielas de todos en cualquier torneo que disputan.
El conjunto de DWG KIA ha demostrado ser una apisonadora en esta final, y ya mete miedo a cualquiera de sus rivales. El resto de rivales debe conformarse con seguir la estela, e incluso deben dar gracia. Como si del mejor Golden State Warriors que ha pasado por la NBA se tratase, DWG maneja la LCK con mano de hierro.
DWG KIA es el campeón de la final de la LCK de primavera
Al igual que los chicos de Klay Thompson y compañía, DWG no hizo lo difícil ganando la LCK. Como han demostrado infinidad de conjuntos campeones, lo difícil es mantenerse en la cima. Ser el equipo a batir a lo largo del tiempo es agotador física y mentalmente, porque todos quieren pasar por encima de ti. Sin embargo, desde su caída a los infiernos en la Mid Season Cup, han conseguido “dos anillos” consecutivos en su país.
A lo largo de la temporada regular han tenido varias versiones, aunque por suerte para ellos la buena ha aparecido en mayor número de ocasiones. El conjunto surcoreano ha barrido a la mayoría de sus rivales sin apenas sufrir, aunque también han tenido apagones. Curiosamente, en sus dos victorias de la LCK terminó con un 16-2 de marcador global. En esta ocasión tan solo Gen.G y Fredit BRION fueron capaces de hacer sangrar a los campeones.
Por desgracia para sus rivales, la cosa no ha cambiado en playoffs. Clasificados directamente para la final de conferencia (semifinales), DK se encontró ante Hanwha Life. El conjunto, plagado de jóvenes talentos y de algún que otro veterano, llegaba con ilusión en su primer año de proyecto. Como si de unos Boston Celtics ficticios se tratasen (tan ficticios que tendrían que cambiarse de conferencia), los chicos de Kkoma pasaron por encima. Un 3-0 cómodo y a esperar rival en la final.
Y qué rival. El equipo que llegaba por el mismo camino que ellos fue Gen.G. Directos en semifinales y encajando un 3-0 a T1, los chicos de Ruler escalaron hasta la gran final. El duelo, que se presuponía igualado tras las muestras de nivel de uno y otro, juntaba a los dos mejores conjuntos de la temporada. Al estilo de los Cleveland Cavaliers de Lebron James, Gen.G era el único que podía parar los pies a los actuales campeones del mundo.
Sin embargo, no todo sale igual que se planea. La final fue una de las más rápidas que se recuerdan, y los favoritos consiguieron volver a cerrar por la vía rápida con otro 3-0. De esta forma, DWG KIA conseguía su segunda LCK de forma consecutiva, y ya son cuatro los torneos en los que participan y se llevan la victoria (Mundial y KeSPA Cup). Pero las comparaciones no acaban aquí. Si DK se parece al equipo de la bahía de San Francisco no es solo por su recorrido.
Cada uno de estos jugadores que forman el núcleo campeón de DAMWON tiene un punto de similitud con el famoso quinteto campeón de la NBA. De vencedor a vencedor. Uno de los mejores equipos de la década en la NBA junto a uno de los equipos surcoreanos que puede marcar una época. Comenzamos.
Si hay un jugador reconocido de Golden State Warriors, es Stephen Curry. Jugador franquicia que ha conseguido llevar al equipo a su máximo nivel. Capaz de lo mejor cuando su equipo lo necesita, creador de jugadas fantásticas que no sabíamos ni que existían o acaso eran posibles. Tiene en él esa magia característica de los campeones, de no saber por dónde te va a salir, pero saber que si pilla las riendas del equipos, estás acabado. Y ese perfil en DK tiene un nombre: Showmaker.
Showmaker, jugador franquicia y jugón
El carrilero central surcoreano es una bestia, pero no sorprende a estas alturas a nadie ya. Dominador absoluto de su posición no solo en su región, sino probablemente del mundo entero. Te puede sorprender con cualquier campeón, pero si Zoe o Syndra están en sus manos, puedes empezar a temblar.
Sin embargo, el éxito de esos Golden State de la temporada 17/18 no conocerían el éxito sin la otra gran estrella del equipo (con permiso del resto). Curry y Durant. Oliver y Benji. Zipi y Zape. Showmaker y Canyon. La pareja estrella de DK, y la dupla que querrías en cualquiera de tus equipos. Ambos se compenetran a la perfección, ya sea de forma directa con ayudas , o de forma indirecta gracias a la presión que ejerce Showmaker en el carril central.
Pero todo equipo tiene a su tercera estrella. Aunque en este caso no brilla tanto como sus dos compañeros, Ghost merece su trozo de pastel también. Aunque de forma más apagada y en sus inicios más intermitente, el tirador surcoreano se ha convertido en un pilar fundamental del club. Su perfecto posicionamiento en las peleas grupales es parecido al que tenía hace un par de temporadas Klay Thompson. Abierto siempre buscando zafarse de su rival, pero sabías que si el balón caía en sus manos, eran tres puntos para ti.
En este caso, Ghost está demostrando desde el pasado Mundial que si el dinero cae en su bolsillo, no es tirar recursos. Pero al igual que la pareja de oro, hay dos perfiles más igual de importantes en este conjunto. Es importante el perfil del arquitecto y del jugón, pero todo equipo necesita a su destructor particular. Si había que poner una tibia de sombrero, Draymond Green era tu hombre. Y aunque molaría ver a Beryl levantarse y hacer una entrada a lo Arturo Vidal, no es el caso.
El apoyo surcoreano es capaz de separar a las principales espadas del rival con campeones como Alistar, Leona o incluso su famoso Pantheon. El muro que necesita DK entre sus contrincantes y sus estrellas es él, y es uno de los mejores en lo suyo. Además, también es capaz de construir, y poner en bandeja a sus compañeros las peleas y las partidas, en general.
Por último, el quinto elemento. Ese jugador que aunque los medios no le han dado tanta repercusión como al resto, tiene el mismo valor o más. Un jugador como Andre Iguodala, que saliendo del banquillo era capaz de revertir partidas, dar descanso al resto y ser un muro o una estrella según se necesitase de él. Ese es Khan.
El último baile de Khan puede ser el más satisfactorio
El jugador, que estaba con el pensamiento de retirarse tras su amargo paso por el conjunto de FPX, vio en Kkoma (Steve Kerr) esa persona que animó al jugador a seguir. Juntos se hicieron con la cima del mundo, y juntos volverían a competir por ella. Khan es ese jugador polivalente y veterano que da cohesión al resto. La estrella en ciernes Nuguri se va, pero el equipo suple bien con veteranos. No por nada son el equipo a batir.
Así pues, tras hacerse con la corona del mundo el año pasado, y con la vista puesta ya en el MSI, DWG KIA será el representante de la LCK. Después de varios años pobres para los equipos de su región, los chicos de Showmaker serán los abanderados de un país entero. Los jugadores franquicia tienen ese poder.