Para el tirador de T1, Lee Min-hyeong “Gumayusi”, el año de nacimiento no es un justificante para definir quién es el ‘hermano mayor’. Él es el sexto hermano de un total de siete. De una familia en la que el talento recorre las venas, por lo menos para lo que los videojuegos se refiere. Crecer con Lee Shin-hyung “INoVation”, jugador profesional de Starcraft II, se trataría de un privilegio para más de un seguidor del videojuego creado por Blizzard Entertainment. Sin embargo, para él fue una completa normalidad. Con la posibilidad de alzarse con la Copa del Invocador, el ADC surcoreano busca superar a su cofrade. Todo para demostrar que es el ‘mayor’, tanto en su seno familiar como dentro de su club.
Decían las Ninjas del Corro en una entrevista para Neo2 que “el mundo del rap está lleno de códigos, es un lenguaje que debes aprender para entender muchas cosas de su historia y de lo que te rodea. A veces es un rompecabezas con el que te diviertes y otras veces una vía de desahogo para tus problemas”. Dentro de los deportes electrónicos se puede aplicar exactamente la misma premisa. League of Legends tiene su idioma particular, mientras Counter-Strike otro completamente distinto. Los jugadores profesionales pueden llegar a compartirlos, pero no sólo eso, sino que como Gumayusi también pueden llegar a crear los suyos propios.
Hay que jugar muy bien entre el descaro y el autoconocimiento para ser consciente de que tarde o temprano llegará tu oportunidad. No sólo en los deportes electrónicos en general, también dentro del mejor club de la historia de League of Legends. Gumayusi se mueve en el código del descaro, en el de no tener miedo ni a nada ni a nadie. De no ser así, no se explicaría que le afirmara al mismo CEO de T1, Joe Marsh, que se quedaría en el club porque era mejor que Park Jin-seong “Teddy”. El tiempo le ha dado la razón al carismático compañero de Ryu Min-Seok “Keria”. Pero inconforme con ratificar que tiene razón, desde su llegada a la élite cuenta con una obsesión: devolver a Lee Sang-hyeok “Faker” su corona.
Los jugadores titulares no son lo único que no ha cambiado de 2022 a 2023 dentro de T1. La voluntad de Gumayusi sigue intacta. A lo largo de su carrera ha contado con distintos estados de forma, pero eso nunca ha quebrado la voluntad de devolver a Faker su reinado internacional. El Rey Demonio ha sido tanto fuente de innovación como inspiración dentro de League of Legends. Muchos jóvenes han crecido a través de sus éxitos, por eso existe la voluntad popular de verle triunfar de nuevo. Otros profesionales tendrían más respeto o más ‘miedo’ al estar al lado del mejor jugador de la historia. Shin-hyung es todo lo contrario: se crece porque quiere ser su hermano mayor.
Gumayusi puede cantar lo mismo que Cruz Cafuné en Fabiola: “Si sientes dolor o hambre yo también lo voy a sentir”. Pero el tirador no sólo se limita a querer ayudar al Rey Demonio, sino que quiere ser protagonista en ese proceso. En lugar de esperar ser una base sobre la que el medio se pueda sostener, siempre ha intentado ser el foco principal. Ha buscado acumular todas las miradas para que el público vea cómo le sirve a Faker los triunfos internacionales que se le han resistido desde 2017. Pocos mejores reflejos existen como las declaraciones antes de las semifinales contra JD Gaming: “La gente me pregunta cómo voy a parar a Ruler. No le voy a parar, le voy a destrozar”.
El tirador de T1 ha llegado tanto a disfrutar como a pagar caro el precio de ser un jugador de personalidad descarada en un sector tan pendiente del “qué dirán”. No obstante, los códigos de Gumayusi son innegociables tanto dentro como fuera de la Grieta del Invocador. La agresividad y la desfachatez no se pueden tocar porque se perdería la esencia, siempre tan buscada en mundos tan distintos como los deportes electrónicos o el rap. Ha jugado, juega y quiere jugar a ser el ‘hermano mayor’ de Faker dentro de League of Legends. También para serlo en su propia familia, para demostrar que el éxito no sólo se centra en INnoVation, especialmente tras las tres finales perdidas durante el año pasado. Pocas redenciones pueden llegar a saber tan bien como la suya.
La lírica de Gumayusi es fácil de entender
La lírica de Gumayusi siempre ha sido muy sencilla de entender. Tener como ídolo a Jian Zi-hao “Uzi” demuestra una intención: vivir para dominar la Grieta del Invocador a través de la calle inferior. Hacer que los asesinatos se conviertan en un vicio. Generar adicción a las fases de líneas con una base potente detrás. A este característico aspecto del tirador también se le añade el hecho de ser prominente a través de personajes como Jinx o Aphelios. De todas maneras, su estilo siempre supone un riesgo. Tanto el ritmo alto en el rap como en League of Legends no entienden de puntos medios. Ofrece resultados muy vistosos, pero tanto para la mejor de las situaciones como para las peores.
Gumayusi también ha contado con el placer de jugar durante la mayoría de su carrera compartiendo Keria. Todavía quedan muchas incógnitas sobre cómo sería su futuro con un apoyo completamente distinto. Sin embargo, volviendo al presente, el tirador ha mostrado ser el complemento perfecto. Durante la ausencia de Faker, él fue el jugador más regular (curioso cuando anteriormente fue criticado por ello). Pero si T1 ha conseguido revolucionar el metajuego en las rotaciones para favorecer la calle inferior, también es porque el ADC tiene las condiciones óptimas. Pocos jugadores en el mundo son capaces de seguir la velocidad de Min-seok durante la fase de líneas. Pero ambos juntos no sólo se complementan, sino que se retroalimentan porque su manera de entender el videojuego es así.